Existen pocas piezas tan versátiles como los bancos. Encuentran su sitio en cualquier estancia y, sin embargo, no se utilizan tanto como cabría esperar de un asiento que es mucho más que eso.
Los bancos son perfectos para comedores, ya sean dentro del hogar o en el exterior. Pero en el baño aportan funcionalidad y almacenaje y en la entrada, carácter.
En el post de esta semana repasaremos estos y otros rincones del hogar para los que los bancos son el mueble perfecto.
En el recibidor
Los recibidores son espacios en los que nos cuesta sacarle partido al espacio. Y, sin embargo, es el lugar en el que más funcionalidad necesitamos para el día a día.
Una solución perfecta para este tipo de estancias de paso es colocar un banco que nos permita calzarnos y descalzarnos cómodamente. Además, al no ser una pieza compacta evita esa sensación de agobio que podría generar un armario o una cómoda.
Para aprovechar el espacio al máximo añade elementos de almacenaje como cestos bajo el asiento y un perchero en la pared en el que dejar ropa de abrigo y accesorios.
En el salón
Cuando se utiliza la imaginación, las posibilidades que nos da un banco en el salón son prácticamente infinitas. Puede servir como lugar de almacenaje o como mesa auxiliar que también puede hacer las veces de asientos extra cuando se organiza una reunión en casa.
Y en el caso de que quieras aprovechar al máximo el espacio y no cuentes con un salón espacioso, puedes incluso crear tus propios sofás con bancos de madera hechos a medida.
En los casos en los que el salón cuente con una chimenea, un banco puede darnos la solución al antiestético problema de tener la leña a mano sin afectar al diseño. Añádale unas estanterías sencillas de tableros de madera para crear un rincón perfecto y funcional.
En el comedor
Si existe una zona en la que está más extendido el uso de los bancos, es el comedor. Este tipo de asiento es ideal para aprovechar espacios pequeños y crear una zona para comer en rincones estrechos.
Igual que ocurre con las mesas de madera a medida, podemos diseñarlos del tamaño deseado para que acomoden al número adecuado de comensales sin saturar la estancia con sillas.
Para darle un toque más acogedor añádele tantos cojines como quieras y, si estás creando un comedor en un rincón de la cocina (como a menudo sucede en apartamentos pequeños) instala un banco hecho a medida con almacenaje bajo el asiento.
En el baño
Otro de los puntos flacos de muchos hogares en lo que a espacio se refiere. Es muy común echar en falta un lugar en el que colocar las toallas, los productos de higiene y otros elementos decorativos en el baño.
En estos casos, un banco es el elemento perfecto ya que no necesita tener grandes dimensiones para resultar funcional.
Puede colocarse junto a la ducha o la bañera para tener a mano las toallas al salir o bajo el lavamanos si este solo consta de pila.
Además, es muy útil a la hora de realizar algunas rutinas de belleza como aplicarse crema hidratante, ya que permite sentarse en él cómodamente.
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